Humedad ascendente por capilaridad en muros
HUMEDAD ASCENDENTE POR CAPILARIDAD, EN MUROS
Cuando la humedad asciende por las paredes, a través de capilares que son de muy escaso diámetro, alcanzando diferentes alturas, y manifestándose como una aureola mas oscura en cuyo borde se aprecian eflorescencias, abultamiento o disgregación del material, estamos en presencia de humedad por capilaridad. Se diferencia del resto de las humedades, por manifestarse en una sola franja y no en forma discontinua. Por lo general el borde superior es irregular y crece en altura cuanto mas ancho es el muro. Para solucionar este problema existen distintas alternativas, como por ejemplo:
· Se introducen en la pared una serie de electrodos de cobre que actúan como un cátodo; y en el terreno se coloca un ánodo que es una toma de tierra de hierro galvanizado. Este proceso se denomina electroósmosis.
· Se utiliza también el sistema eléctrico, que consiste en equilibrar el diferencial de potencia existente entre la pared y el suelo (causal del ascenso de humedad), por medio de la colocación de una batería eléctrica.
· El mas antiguo de los sistemas es el de reconstituir las capas aisladoras horizontales existentes (o no), y consiste en cortar el muro de lado a lado y en tramos de hasta un metro, según la solidez del muro. Se corta un tramo de un metro y se deja otro de la misma medida sin cortar, para luego cortar otro metro, o sea se divide en tramos y se corta uno si, otro no, uno si, oto no, hasta alcanzar la longitud total a reparar. Una vez reconstituidos esos tramos salteados (por medio del método de la doble hilada de ladrillos con su correspondiente doble capa aisladora horizontal y cerrada tipo cajón, con capa aisladora vertical), se procede a cortar el resto de los tramos que habíamos salteado, para luego realizar el mismo trabajo que en los tramos anteriores. Es importante que una vez concluidos los primeros tramos, se los deje fraguar muy bien, para proceder con el corte de los segundos tramos. También debe tenerse especial cuidado de trabajar muy bien las uniones entre tramos de primera y segunda etapa, para asegurarnos que la humedad no encuentre paso alguno. En algunos casos es importante la colocación de láminas de membrana de PVC, polietileno u otros, para reforzar la nueva barrera formada.
· Otra solución habitual es la inyección química, y consiste en la aplicación de un producto líquido que se introduce en la pared, recomponiendo la impermeabilización del muro. Luego de retirar las capas de revoque que se encuentran en mal estado, se efectuarán orificios con mecha de widia de 13 a 16 mm y taladro eléctrico en el muro, de acuerdo al caso particular y según las indicaciones del fabricante (generalmente en tresbolillo, con una separación de 20 cm entre capas y entre perforaciones y a 10 cm desde el piso a la primer capa, siempre perforando a 45º hacia abajo). Luego, se introducirá por esos orificios el producto líquido, el cual obturará los poros y capilares de la pared. Finalmente, se revocará en ambos lados la pared, con una capa de mortero hidrófugo, al igual que en el procedimiento anterior. Esta solución es muy efectiva, y es particularmente adecuada para aplicar en muros de ladrillos de espesor hasta 0,30 m, y los trabajos no consumen tanto tiempo. Su efectividad depende de la capacidad de absorción de los materiales del muro, debe aplicarse de acuerdo a las indicaciones del fabricante o proveedor, y no es apto para casos donde exista presión freática.
Fuente Ing. Alasio y Asociados